Más allá del significado que la navidad ha adquirido hoy en día, hay que recordar que su origen es bien diferente. Seres distintos, en lugares distintos pero con una misión común, la propagación de una misma tradición mística y espiritual.
Ho´oponopono nos recuerda todo nuestro poder creador y nos anima a modificar y enfocar nuestras creencias de una manera positiva. Estas creencias, que siempre hemos aceptado como auténticas, pueden ser engañosas. Son acuerdos con respecto a la realidad que hemos reconocido y mantenido sin cuestionar. Cuando nos enfrentamos y nos encontramos con ellas, podemos llegar a descubrir con sorpresa que muchos pensamientos y sentimientos que nos han acompañado durante nuestra vida y que hemos tenido siempre como nuestros, han sido en realidad adquiridos a través de nuestra herencia genética, educación, entorno…. pero es posible que en realidad no nos pertenezcan.
Existe mucha información acerca de esta maravillosa técnica, pero al ser experiencial, en muchos casos sólo vivenciándola podremos hacernos una idea de la magnitud del método. La función básica de las constelaciones es ordenar. El orden es sí es pura …
Ahora, en estos momentos de transición histórica, energética y espiritual, Europa está sufriendo los embates de tantos errores históricos promovidos desde una realidad que ya no es ésta.
Somos “Seres Humanos”, y como tales nos componemos de una entretenida dualidad, la del Ser y la del Humano. Cuando nos encontramos en la primera disfrutamos del inigualable encuentro con nuestra esencia, de una lucidez absoluta, de una calma y una paz indescriptibles… pero entonces el Humano tira de nuestro Ser arrastrándole hasta la ineludible realidad de nuestra querida tierra.
Como mujer hemos de investigar en nuestro verdadero espíritu femenino, encontrar nuestra armoniosa esencia y expresarla a través de nuestros actos, de nuestras palabras, de nuestra mirada…
Cada uno de nosotros poseemos una luz propia y única. Quizás nos educaron comparando esa luz con las de otros, haciendo destacar nuestras zonas más oscuras en detrimento de las luminosas. Esta sociedad a veces impone un código de valores erróneo aunque necesario para nuestro aprendizaje, pero llega un momento en el que ya hemos de tomar las riendas de nuestro poder, re-cordando quiénes somos en realidad. Seres de Luz viviendo una experiencia humana.